EL INGENIERO DE LA MOJANA
Jesús creció viendo máquinas de trabajo pesado en los campos sembrados de arroz en Majagual, Sucre. Por su condición humilde en su infancia no tuvo juguetes sofisticados.
Mientras su padre trabajaba largas jornadas en los cultivos de arroz él convertía restos de madera en juguetes, poco a poco fue usando más materiales para la elaboración de estos, la madera era el insumo principal de sus prototipos a los que le fue adicionando piezas metálicas y pequeños dinamos, mecanismo eléctricos que hacían que sus piezas inanimadas fueran cobrando vida y se asemejaran cada vez más a las máquinas que lo inspiraron.
Este estudiante de noveno grado de la escuela superior de la Mojana ocupa su tiempo libre construyendo modelos a escala de las piezas de ingeniería que más le gustan. Entre sus colección hay catapilas, retroexcavadoras, tractores y helicópteros, todos estos tienen la particularidad de que pueden mover algunas de sus partes.
El helicóptero mueve su hélices gracias a un dinamo y una batería que le da energía, el mismo mecanismo que usa para que los tractores muevan sus llantas, mientras que en la retroexcavadora el sistema que le da fuerza e impulso a la pala es un mecanismo que inyecta agua a través de unos tubos delgado haciendo que el modelo se mueva.
El helicóptero mueve su hélices gracias a un dinamo y una batería que le da energía, el mismo mecanismo que usa para que los tractores muevan sus llantas, mientras que en la retroexcavadora el sistema que le da fuerza e impulso a la pala es un mecanismo que inyecta agua a través de unos tubos delgado haciendo que el modelo se mueva.
Sus compañeros de colegio le hacen ronda a Jesús Alberto para ver funcionando las máquinas, una de las favoritas es el helicóptero, Jesús aspira a seguir desarrollando este prototipo hasta hacerlo volar.
- Me parecen juguetes muy productivos, así se han generado los grandes ingenieros, son cosas que enriquecen mucho la región y generan espacio donde los jóvenes se pueden recrear, son cosas que ellas generan por sus propios instintos-
esto expreso Osvaldo Vicente Villalba, compañero de clases de Jesús y uno de los muchacho que más lo ha apoyado en su empresa.
El sueño de Jesús Albertos es ser ingeniero y llevar a los campos de su pueblo maquinarias diseñadas por él. -mis papás me apoyan que sigan adelante y que termine mis estudios para que sea un gran ingeniero- Jesús.
Hoy Jesús quien no tuvo con que jugar en su infancia tiene los juguetes más avanzados de majagual.
Jesús Alberto exponiendo sus juguetes en la Escuela Normal Superior de la Mojana. Foto Miller García
Jesús es cuidadoso de los detalles, con mucha paciencia va pintando marcas como Catterpillar y Jonh Deere, para darle más realismo a los modelos.
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